Los cristales biselados se realizan mediante la creación del bisel o corte en angulación a lo largo de la periferia del vidrio, generalmente grueso. A través de esta técnica se produce un juego de luces producida por la difracción de color que produce el bisel al actuar como un prisma.
Se aplican, por lo general, en cristales para puertas, en ventanas y tragaluces pero tiene muchos otros usos y combinaciones que pueden crear puertas y pantallas laterales de espectulares acabados.